Provita continuará la restauración ecológica del bosque seco de Macanao este 2022

Prensa Provita Nueva Esparta. (CNP: 21.465).- El Plan de Restauración Ecológica del Bosque Seco de Península de Macanao ha abarcado en los últimos años acciones para restablecer las condiciones naturales al ecosistema que es hábitat de una importante diversidad biológica, incluida la cotorra margariteña (Amazona barbadensis), principal protagonista del programa de conservación que por más de tres décadas lidera Provita en Nueva Esparta.


José Manuel Briceño, subdirector de la ONG para Nueva Esparta, explicó que la restauración es un proceso lento porque no sólo se trata de sembrar árboles sino de “hacer un trabajo científico previo de identificación de especies” y de acciones que permitan a los nuevos individuos “adaptarse a las condiciones del entorno”.


“Adicionalmente proponemos buenas prácticas que permitan que estas plantas, que son sembradas ahora, lleguen a una edad adulta y sean refugio para la gran diversidad presente en la Península de Macanao. No sembramos sólo por sembrar”, dijo.


Briceño destacó que con la incorporación del guayacán (Guaiacum officinale) se busca no sólo ampliar las especies nativas con las cuales se restaura el bosque, sino darle valor al acervo cultural, histórico y natural que este árbol tiene para Nueva Esparta.


“Para el 2022 tenemos la meta de plantar al menos 3 mil árboles, de éstos, 500 serán guayacanes”, precisó.


Luis Guevara, biólogo y analista de restauración del Programa de Conservación de la Cotorra Margariteña (PCCM), dijo que en las parcelas que hasta ahora han sido restauradas, que están ubicadas en el Área Comunitaria de Conservación Chacaracual (ACCC), Arenera El Manglillo y Arenera La Chica, existe un promedio de 72% de supervivencia de árboles.


“En este momento nuestros viveristas se encuentran en fase de recolección de semillas, germinación y preparación de viveros para la producción de plantas. Esperamos que este 2022 podamos hacer al menos dos actividades de siembra”, explicó.


Guevara refirió que en diciembre de 2021 se plantaron 84 guayacanes como parte de un experimento para evaluar el efecto de las micorrizas (hongos simbiontes) en su crecimiento y sobrevivencia.


Las actividades de siembra se realizan con el apoyo de los Ecoguardianes, aliados institucionales y las comunidades de Macanao, explicó Briceño. En todos los casos, se toman en consideración las medidas de bioseguridad contra la Covid 19.


Asimismo, Briceño destacó el impacto social que ha tenido la implementación de los viveros comunitarios, pues ha implicado la formación de estas personas para llevar adelante con éxito esta iniciativa y además se ha convertido en una fuente de ingresos para las familias involucradas.


Fotos: Luis Guevara

10-04-2022